Presentación Personal

Breve historia sobre mi.

 

Soy una tica que adora su país natal, crecí en un pequeño y sencillo pueblo en el sur de Costa Rica, eran los 60s cuando mis padres me llevaron a vivir ahí, tenía unos 4 años de edad, apenas si recuerdo las calles polvorientas y en tierra, un calor sofocante sin brisa que lo atenuase, pero con mucho espacio y libertad para que un niño creciera a sus anchas, corriendo por doquier y experimentando la vida, sin muchos peligros que acecharan, más que los que se pueden encontrar cuando se vive rodeado de naturaleza, ríos, bosques, diversidad de animales y con muchos niños con quien compartir, hermanos y vecinos. Crecí libre y muy feliz, hasta que cumplí los 15; mi vida dio un giro abrupto. Llegó el momento de dejar el nido y tomar las riendas de mi vida, me soltaron como soltar a un pájaro después de estar enjaulado, no sabía volar. De vivir en un pueblo donde todos se conocían, pasar a vivir a la gran ciudad, sin manual y sin apoyo.

Mi vida, como la de todos, tiene diferentes facetas, algunas muy difíciles de superar y otras terribles de transitar, pero todas y cada una de ellas con grandes lecciones de vida, aunque en el momento que las experimenté, no las reconocía como lecciones de vida que me llevaban a evolucionar positivamente, si no que mas bien creía que la vida era así de cruel con migo.

Después de superar y dejar atrás tantas aventuras positivas y negativas, terminé haciendo todo lo que la sociedad nos enseña que debemos hacer para alcanzar el éxito y ser felices, sin embargo, más adelante en la vida empecé a darme cuenta que ese no era el camino al éxito y mucho menos a la felicidad. Títulos, reconocimiento social, parejas, hijos, cosas materiales y todo lo que ya se sabe que nos venden para alcanzar la “plenitud”, todo eso se desvanecía con el paso de cada experiencia, todas esas promesas vacías sin fundamento, se convirtieron en un engaño en mi experiencia de vida, tenía que hacer algo diferente.

Un buen día decidí que renunciaría al trabajo “estable”, para ir en busca de algo mejor, sabía que había algo mejor, no sabía que era o dónde se encontraba, pero mi corazón latía fuerte de solo pensarlo. Sin ningún plan o rumbo, renuncié. Debo mencionar que sin excepción, fui criticada y tachada de “loca”, por no mencionar palabras más rudas, por aquellas personas con las que me rodeaba en aquel entonces, eso me produjo mucha incertidumbre por bastante tiempo, hasta que comprendí que tomar el camino contrario de lo que nos enseñan, era la dirección correcta, si quería alcanzar un cambio significativo, libertad y paz mental en mi vida.

Aquí estoy hoy a mis 59 años de edad, escribiendo brevemente sobre mi vida pasada. Hay mucho que contar, lo iré narrando en este blog desde un enfoque positivo, para que sirva de motivación y enseñanza a quien le guste leer, inspirarse y aprender de historias vividas.

Gracias por compartir su tiempo en éste blog, su blog.  Merce Pérez.